El arte de una negociación racional

(Mas reflexiones sobre un tema trascendente)

Todo es negociable. Todos ganan. Pero pocos lo aplican. En un mundo interconectado las interrelaciones exigen un permanente proceso de negociación en todos los ámbitos. No hay fórmulas ciertas, pero si estilos y actitudes a desarrollar. Influir sobre otro, producir intercambio, no es un conjunto de trucos ni triquiñuelas. 

El secreto para desarticular a la otra parte es la sorpresa. Usted debe hacer lo opuesto a lo que se espera que haga. Si son rígidos, esperan que usted haga presión, si su estrategia es de ataque, esperan que usted se resista. No los presione ni se resista. Haga lo opuesto: colóquese de su lado. Eso es lo último que esperan de usted. Si usted se pasa de su lado los desorienta y les permite abrirse pare cambiar su postura contraria. Más aún, como dicen algunos maestros japoneses: es duro atacar a alguien que de pronto se pone de nuestro lado. Pero lo que es más importante, lo coloca a usted y a su oponente del mismo lado, justo donde usted quiere estar para comenzar una negociación constructiva.

Para ponerse del otro lado es necesario hacer dos cosas: escuchar y reconocer.

Poder es influir sobre los demás, en forma sutil y ganando su voluntad, y una cosa muy importante a tener en cuenta la información actualizada refuerza nuestro poder, nos da más opciones y argumentos.

Actualmente cualquier persona de mediana capacidad y con cierta voluntad puede transformarse en un negociador, si se lo propone, la tecnología permite una formación sistemática y racional.

La negociación no debe ser una rivalidad intelectual o emocional, sino un  intercambio constructivo, debemos evitar la situación en la que la otra parte no tiene voluntad de colaboración y rivaliza con nosotros.

25-09-2020